Surcoreanos al poder que deja vacante un gran campeón.

La Champions asiática llega a semifinales y el verde oriental se llena de la pasión de las rondas finales continentales. Ya hablé del torneo en mi otro blog (aunque me he dado cuenta de que dejé incompleta la mini-guía) y quizá hubiera merecido un seguimiento más exhaustivo, pero entre el Mundial y el inicio de las competiciones en Europa no me dio suficiente tiempo. Volvemos ahora nuestra atención de nuevo hacia Asia cuando la Liga de Campeones termina de mascar su desenlace.

La ciudad siria de Homs acogió uno de los terremotos más sonados en el fútbol oriental gracias a una prórroga de infarto e infortunio para las "abejas triunfadoras". Los bicampeones de Al Ittihad han caído eliminados en cuartos y no podrán defender por tercera vez su cetro continental. El 2-0 que traían de Jeddah y su condición de vigentes campeones y máximos favoritos parecían haber finiquitado una eliminatoria que no parecía dar más de sí. Ni siquiera cuando, al filo del descanso, un pelotazo sin aparente sentido fue controlado de maravilla por Al Hamwi, cuyo medido centro lo remachó a la red Iyad Mando. Tres minutos después, los sirios igualaban la eliminatoria desde el punto de penalti pero el árbitro ordenó repetir y Mabrouk Zaid (el meta saudí en el Mundial) detuvo el segundo lanzamiento, ejecutado esta vez por el brasileño Fabio Santos. Ese desconcierto pareció encorajinar a los sirios, que empataron el cómputo global y marcaron dos goles más en una prórroga de verdad extraordinaria que os recomiendo buscar, disfrutar y grabar.
Nunca conté con Al Karamah, pero la verdad es que han conseguido un auténtico hito y ahora nada les asustará. Cierto que los saudíes no contaron con Borgetti, Keita estuvo horroroso, Dukhi fue un "agujero", ...

Mi escaso "ojo" en este torneo se completa con el pase de los kuwaitíes de Al Qadisiya. Pasaron en el grupo por delante del Pakhtakor uzbeko, uno de los "ogros" de la competición. Y ahora han vapuleado a Al Ain, el equipo dirigido por el rumano Anghel Iordanescu, ex seleccionador de su país. El 2-2 de la ida en Kuwait y la mayor experiencia del equipo de los UAE (Jestrovic,
El campeón kuwaití, una vez olvidada las bochornosas imágenes que nos dejaron en 2004, es un conjunto técnico y ordenado. Ante todo, joven y con ilusión. El presente y futuro de Kuwait está en ellos representado, y machacaron a los del "coronel rumano" golepando a la contra y controlando con sesiones largas. Ojo a jóvenes como Badr Al Mutawa, tal vez ya el mejor jugador del país aunque para nada decisivo en la ronda de cuartos, Nawaf Al Mutairi, pura chispa y talento aunque un poco "verde" aún o el omaní Fawzi Basheer, ejecutor de Al Ain.

La otra semifinal será exclusivamente surcoreana, por lo que el fútbol que tanto progresó con Hiddink se ha asegurado ya un representante en la gran final de noviembre. El Ulsan cumplió con el trámite ante Al Shabab, después de humillante 6-0 del duelo de ida. La defensa de los de Humberto Coelho fue pura mantequilla para los coreanos, que fueron lo más parecido a un cuchillo de acero. Cuentan con buenos jugadores locales, como Lee Chun Soo (enorme su golazo de falta en el partido de ida) o Choi Song Kuk, y el clásico aliño brasileño con Vinicius, una especie de Cafú adaptado al fútbol oriental, el potente Leandro Silva y otro Leandro, éste de apellido Machado y ex jugador del Valencia.

Su rival en semis será el Jeonbuk Hyundai Motors, que ha eliminado a los chinos del Shanghai Shenhua en otra eliminatoria de infarto. Su remontada permite disfrutar de este duelo fratricida en semifinales.
Los chinos habían ganado 1-0 en el partido de ida, y se adelantaron a la media hora de juego en la vuelta gracias a Gao Lin. Pero "la tanqueta" brasileña Ze Carlo le dio la vuelta al partido con dos goles y provoando la expulsión del internacional chino Li Weifeng; Hyeon Ki Hyun y Chung Kung Hwan destrozaron a un cuadro chino que se había pertrechado atrás en busca de mantener a toda costa su renta. El ex del Bayern Jancker maquilló el marcador pues el Jeonbuk no sufrió en los minutos finales y pasa a semifinales por segunda vez en su historia. Y eso que no contó con el genial mediapunta brasileño Botti...

Yo recomendaría no perderse las semifinales de un torneo que tiene un aroma especial y un sabor adictivo. Un estilo de fútbol de élite muy diferente a lo que conocemos en Europa pero, al menos, igual de atractivo. El próximo miércoles, partidos de ida.


Foto: WSG (Ze Carlo y Chung Kung Hwan, del Jeonbuk, celebran el cuarto gol ante Shanghai Shenhua)