Sábado rico, víspera de domingo millonario.

Si el día de ayer nos pareció excitante, lo de este domingo no tiene precedente. Por eso, porque estamos ante un fin de semana inusualmente rico en grandes partidos, he decidido "partir" en dos la mini- crónica habitual de cada semana y así destacar algún aspecto más de todo lo que estamos ya viviendo.
Para empezar, ayer se disputó la mitad de la jornada de Premier, quedando para hoy el gran duelo ManU- Liverpool y el partido del Arsenal. El Chelsea ganó al Pompey en Stamford Bridge por 2-1, resultado que pudo y debió ser más abultado. Mourinho sentó de inicio a Makelele y alineó a Robben, con lo que el 4-1-3-2 era más acusado, con Essien de único pivote defensivo. La primera media hora fue del Portsmouth, pero Robben se entonó y el Chelsea, que siempre sabe sacar el máximo de la más mínima debilidad del rival, empezó a crecer por ahí en el choque. El extremo holandés hizo una vía de agua por su banda y el Pompey se fue ahogando siguiendo la estela del horrible Pamarot. Marcaron Shevchenko y Ballack, los dos grandes refuerzos blues del año, lo que debe ser aprovechado por ambos para empezar a rendir más. Mourinho, que jamás conoció el rubor si de alcanzar culquier triunfo se trata, llenó el campo de hombres defensivos y espera ahora al gran duelo de Old Trafford.
En los demás partidos, goleada del Wigan al Manchester City, con nueva exhibición de despropósitos defensivos de Richard Dunne y cía. A los tres minutos, los Latics ya ganaban 2-0 con un golazo de Heskey y una pifia "marca de la casa" del central irlandés.
Cómodo triunfo del Everton ante el recién ascendido Sheffield, con buen gol de Arteta de cabeza, confirmación del mal momento del Charlton, que no pasó de empatar en casa con el Watford (Dowie pende de un hilo) y otra igualada, ésta entre Villa y Fulham. Es difícil ver a un técnico listo y solvente como Martin O´Neill equivocarse tanto en un partido (tiene al Villa invicto): Ridgewell de lateral era una mala opción a todas luces, quitó a Agbonlahor de la derecha y le puso en punta para dar entrada a Agathe (desperdició tantas jugadas como tuvo), permitió a Stilian Petrov pasearse literalmente por el campo sin correr durante toda la segunda parte, ...

Golpe en la mesa del Werder Bremen en la Bundesliga, tras superar al Bayern por 3-1. El torneo alemán está más abierto e igualado que nunca, de arriba a abajo. Los de Thomas Schaaf se colocan en cabeza junto al Schalke tras jugar otro buen partido y aprovecharse de los problemas del "gigante" bávaro. Diego abrió el camino con un golazo espectacular, Wome lo allanó con un buen zurdazo y un autogol de Lucio sentenció al Bayern. Entre medias, Makaay volvía a ver puerta y la meduar de los de Magath no aprovechó las tradicionales "lagunas" del Bremen. Si no les golpeas ahí, estás perdido, porque atacan con el cuchillo entre los dientes.

Por destacar un par de detalles más, en la Bundesliga austriaca el Rapid sigue sin levantar cabeza y uno empieza a acostumbrarse ya a ver en la parte baja a los dos históricos de Viena. Ayer, sufrieron para salvar un punto en casa ante el colista Ried con un gol salvador del croata Mate Bilic (ex de varios equipos españoles: Zaragoza, Almería, Córdoba, Sporting). El Rheindorf Altach sorprendió al Wacker Tirol (no marcó Leonardo) y el irregular Gilewicz coloca segundo al Superfund Pasching, esperando al Salzburg- Austria Viena de hoy.
Y, por último, horrible partido del CSKA en la Liga rusa. No jugó absoutamente nada en su partido con el Amkar y no pasó del empate sin goles. De la jornada de hoy, destaca el Zenit- Lokomotiv. Dejaremos los ASES para mañana, que aún nos faltan muchísimas cosas por ver.


Fotos: Getty Images, Die Welt